Cómo montar un estudio de grabación casero

Tanto para los músicos más veteranos como para los principiantes, es muy importante estar listo para grabar cuando llega la inspiración. Para ello, necesitarás un equipo que se adapte a tus necesidades. Y la buena noticia es que hoy en día es muy fácil montar un estudio de grabación en tu propia casa sin gastar todo tu presupuesto. Con el equipo adecuado, podrás dar rienda suelta a tu inspiración y grabar tu propia música en cualquier momento.

Es difícil saber por dónde empezar a la hora de montar un estudio en tu propia casa. Lo normal es que te hagas infinidad de preguntas: ¿Qué equipo debería comprar primero? ¿A qué precio? ¿Puedo instalarlo yo mismo? Para ayudarte, hemos recopilado una lista con todo lo que necesitas para componer música en un ordenador y grabar tu voz y tus instrumentos.

• Una interfaz de audio (tarjeta de sonido)

• Un programa de estación de trabajo de audio digital (DAW) como Logic Pro X, Pro Tools, Ableton, etc.

• Monitores de audio profesionales

• 1-3 micrófonos

• Un filtro antipop

• Un pie de micrófono

• Auriculares de gran calidad o auriculares monitores

• Varios cables multifunción

El lugar no es realmente importante, siempre que sientas la inspiración y estés listo para grabar. Puede ser en un dormitorio o incluso en un sótano. Tienes que asegurarte de que no haya demasiado ruido en el exterior o interferencia de otros aparatos electrónicos. Si no estás seguro, siempre puedes instalar espuma acústica, que se adapta a todo tipo de superficies. La espuma acústica tiene varias ventajas: no solo te protege del sonido exterior, sino que además evita que molestes a los vecinos y te asegura que el sonido sea de gran calidad.

Todo dependerá de tu presupuesto, obviamente. Puedes usar un ordenador que ya tengas o comprar uno de última generación y dedicarlo exclusivamente a la producción musical. Decidas lo que decidas, la mayoría de los ordenadores de hoy en día son adecuados y siempre tendrás tiempo para invertir en uno más potente en el futuro. La clave es establecer las bases primero e ir invirtiendo en un equipo más caro a medida que pasa el tiempo.

La interfaz de audio o tarjeta de sonido hace de intermediario entre los sonidos que entran en el ordenador y los que oyes. En lo que se refiere al precio, podrás encontrar todo tipo de opciones, pero recuerda que te bastará con una interfaz de audio básica.

Encontrarás un montón de información disponible sobre los tipos de micrófonos adecuados para diferentes instrumentos, sonidos y efectos. Lo más sencillo es comprar primero un micrófono versátil que puedas usar con diferentes instrumentos. Lo que sí deberás elegir con más atención es el micrófono para grabar la voz.

La elección del programa de grabación (o DAW) es muy personal y depende de cuál sea tu forma de componer. Lo mejor es empezar probando varios. Hay versiones de prueba y gratuitas como Logic Pro X o Ableton Live que podrás usar hasta decidir cuál es el más apropiado para ti. Si sigues dudando, puedes consultar nuestro artículo «Los mejores programas gratuitos de composición musical» antes de tomar una decisión.

Aunque ahora está extendido el uso de los auriculares para grabar música en el estudio, tradicionalmente se hacía con los altavoces. Los monitores dan una respuesta de frecuencia más plana que los altavoces comerciales, lo que permite juzgar de forma más objetiva la mezcla. Aunque pueden llegar a ser muy caros, es importante invertir en buenos altavoces, la mayoría de los cuales son fáciles de usar incluso para los principiantes.