Modulares para todos

Hola a todos, aquí Iftah otra vez, y hoy me gustaría hablaros de los sintetizadores modulares. A menos que te hayas pasado el último par de años durmiendo bajo una roca, habrás notado que los sintetizadores modulares - especialmente en formato eurorack - están por todas partes. Lo que una vez pertenecía sólo a las academias y a algunos privilegiados ha pasado por un impresionante proceso de democratización y ya se puede encontrar en cualquier estudio. Esta "revolución" o "renacimiento" es particularmente interesante ya que los sintetizadores modulares están cada vez más integrados en la música accesible.

Incluso si eres un productor con experiencia, entrar en ese agujero negro modular requiere bastante compromiso. Es altamente adictivo y consume mucho tiempo, por no hablar de su curva de aprendizaje. Dicho esto, confieso que sigue siendo una de las cosas más increíbles que me han ocurrido durante mi historia de amor con la música y la tecnología.

De costa a costa

Si decides ir por ese camino y dar el salto, hay algunas cosas que debes considerar.

Invertir dinero y construir un sistema que recree un sintetizador de voz tradicional de sustracción podría ser un insuficiente. Aunque consigas redireccionar la señal y modular cosas que de otro modo no podrías, al final lo que consigues es la misma arquitectura de siempre. Construir un sintetizador ‘west coast’, sin embargo, podría darte una fuente de sonido que es probable que aún no tengas en tu estudio. El ‘west coast’ se centra en la visión Buchla de la síntesis que, a diferencia de su primo sustractivo del este, se basa en el principio de comenzar con una forma de la onda armónica leve, como una onda senoidal, y la adición de armonías a través de la modulación de frecuencia, la modulación de amplitud y la modulación de onda. Una voz de sintetizador ‘west coast’ suele consistir en un oscilador complejo (doble oscilador, modulador y portador) un VCA, modulador de onda, puertas de paso bajo y generadores de funciones.

Hoy en día hay muchos módulos que actúan como una voz de sintetizador completa. Aunque puede ser muy interesante, y musicalmente útil, yo los evitaría al principio; el uso de bloques de construcción y parches desde cero por lo general conduce a felices accidentes y resultados únicos. También se aprende algo durante el proceso de parcheado, circunstancias que, por lo general, conducen a nuevas ideas.

Comenzar con poco y mantener las cosas bajo control es lo mejor que puedes hacer, algo que la mayoría de los que nos metimos a fondo en ese “agujero negro” no hicimos. Esos nuevos euro-entusiastas acabaron, por lo general, vendiendo la mitad de su estudio para financiar ese interminable rack (créeme, yo estaba allí), pero, en mi opinión, un rack por encima de 9U acaba siendo poco práctico, a menos que decidas hacer música exclusivamente con tu sistema modular.

Estudio del sistema

Alessandro Cortini (Nine Inch Nails, SONOIO) comentó una vez en una entrevista que dedica tiempo a todos y cada uno de los módulos que posee y que intenta sacarles el máximo provecho. Creo que esta es una técnica excelente que no sólo te ayudará a conocer tu sistema sino que también te hará darte cuenta de cuánto puedes hacer con los módulos que ya tienes, antes de que le vuelvas a dar al botón de "pagar ahora".

El primer año que pasé con mi sistema modular fue el año menos productivo musicalmente en la historia de Skinnerbox. Sucedió por varias razones. En primer lugar, había mucho que aprender, así que me encontré realizando experimentos de sonido en el estudio (que de hecho eran divertidos y fantásticos y sonaban asombrosos y eso) que no conducían a ningún resultado musical. Otro problema es el fenómeno de la “improvisación finita”. Debido a las inmensas posibilidades sonoras y al aprendizaje práctico que requiere el sintetizador modular, es muy difícil dejar de jugar con un parche y darle al botón y ponerse a grabar. Eso es algo que aprendí a evitar pasado ya un tiempo. Ahora intento ser muy concreto con mi aplicación de parches y llegar con una idea específica en vez de perderme en un océano de posibilidades. Un sintetizador modular es cualquier cosa salvo un instrumento inmediato. Puede sonar obvio, pero no es algo que puedas encender y ponerte a tocar directo. Pueden pasar horas hasta que consigues llegar al punto ideal (pero cuando lo haces es realmente ideal), así que necesitas mucha paciencia.

Probablemente sea una buena idea familiarizarte con todo el universo modular intentando algunas emulaciones de software. “Reaktor Blocks”, “Softube Modular” u “OSCiLLOT” son buenos puntos de partida. Experimentar con el flujo de trabajo te ayudará a determinar si realmente se adapta a ti.

Hay un montón de buenas fuentes de información online. Muffwiggler, por ejemplo, es la mayor comunidad en línea centrada en lo modular que también sirve como gran base de datos para todo lo relacionado con módulos, parches y más. Otra gran fuente de información es MODULARGrid, que te permite planificar el sistema, consultar sus especificaciones de consumo de energía, anotar parches e incluso una vista previa de algunos de ellos.

Para terminar, un sistema modular es un instrumento realmente sorprendente aunque sea sólo por su carácter abierto. Sónicamente abre nuevas galaxias de posibilidades que de otro modo serían inalcanzables. Además, también me inspiró a utilizar nuevas formas mi otro equipo de software. La aplicación de técnicas de realimentación y modulación que he aprendido parcheando para Ableton Live, por ejemplo, han dado lugar a resultados muy interesantes.

Si crees que tienes tiempo y motivación suficientes para sumergirte en ello, no te arrepentirás.