Consejos para colaborar en la escena musical local

Colaborar en el marco de la industria musical se asociaba antes a la idea de seguir un sueño para "llegar a lo grande". Ahora, este arquetipo suele idealizarse únicamente a través de los concursos de talentos, los gigantescos festivales patrocinados por empresas y llegar a la cima de las carteleras. Sin embargo, esta agenda parece carecer de mucha conexión con la realidad cotidiana de los músicos independientes ya que muchos están creando nuevos modelos de trabajo para ellos mismos.

Ser un músico exitoso hoy en día consiste más en tocar en directo lo más posible, cobrar y hacer llegar tu música a personas que realmente te aprecien y apoyen. Conseguir un contrato de sincronización o firmar con un sello discográfico puede ayudarte en tu camino hacia el éxito, pero no necesariamente te dará la base orgánica para crear una carrera duradera. En este sentido, muchos músicos están encontrando nuevas formas de colaborar creando verdaderas redes de base para ellos mismos. He aquí algunos consejos sobre cómo colaborar con la comunidad musical independiente local en lugar de permanecer exclusivamente en la típica estructura competitiva de "artista en solitario" o "banda".

A menudo asociamos nuestra forma de hacer música, de consumirla, de formar proyectos y, por tanto, de colaborar con un género, un estilo o una marca de música que está de moda en ese momento. ¿Te has dado cuenta de que cuando un grupo se hace popular, muchos músicos parecen copiarlo en cuanto a sonido o estilo? No te pintes en ningún rincón y busca ser auténtico en tus colaboraciones a lo largo del camino.

Cuanto más variados sean los músicos con los que toques y más variados sean los conciertos a los que asistas, estadísticamente habrá más posibilidades de que aprendas nuevas habilidades, sobre todo si estás abierto y prestas atención a los detalles más finos y a la mecánica de la ejecución. Siempre hay nuevas formas de entrelazar los muchos hilos de colores de la creatividad en la música, tomando las partes de un acto y poniéndolas en otro. Especialmente los jazzistas, los bluesistas y los raperos llevan mucho tiempo haciendo esto y es lo que rompe los límites, aleja las fronteras y desarrolla melodías increíbles. Hace poco vi un concierto improvisado en el que un violinista estadounidense de swing-jazz actuaba en directo con una cantante de folclore tradicional sirio y el resultado fue una música preciosa que nunca había escuchado.

Puede ser muy gratificante formar equipo con músicos y productores para desarrollar proyectos "puntuales", como la grabación de un single, un EP o incluso un álbum completo, o para dar un concierto o hacer una gira completa, o incluso para un simple vídeo en Youtube, pero eso no significa necesariamente que tengas que construir una banda entera con un destino fuera de ella. No tienes que estar casado exclusivamente con una banda o un proyecto. Es saludable tocar con otros y puede ser beneficioso de muchas maneras, como ampliar tu base de fans, tus ingresos, tus contactos en el negocio de la música y tu versatilidad en el escenario y en el estudio. Puedes ser independiente y comprometerte con una colaboración al mismo tiempo.

Salgo a muchas jam sessions, noches de micrófono abierto y conciertos, y me gusta conectar con músicos que no parecen tener nada que demostrar. Encuentra a gente de la que puedas aprender y quizás colaborar, en lugar de simplemente dejarte impresionar. Si no sales y encuentras lo que te conviene, lo más probable es que no crezcas mucho como músico.

¿No es fácil detectar a un artista que parece tener una "misión de Dios"? (Referencia a los Blues Brothers) Los músicos de más éxito que he conocido tocan por amor a la música y eso es lo que les hace seguir adelante. Hay que salir a buscarlos. Porque colaborar con alguien que tiene una agenda rígida, que no para de hablar de planes que son como una especie de religión, puede convertirse en un verdadero obstáculo.